Vida y salud: “Ibiza, antes y después”

Todos la conocemos, y la mayoría la conoce por ser la isla más fiestera del mundo. Lugares como Amnesia, Pachá, Bora Bora, Ushuaia Hotel… fiestas desenfrenadas  en toda la isla, playas, hoteles y discotecas, son el gran reclamo para el turismo de éste lugar. Pero ¿Sabéis como empezó todo en Ibiza?

Allá por los años 60, la isla sólo se conocía por su belleza natural, que inspiraba a artistas de todo tipo, pintores, fotógrafos, intelectuales y músicos, como el grupo Pink Floyd, quienes incluso le pusieron el título “Ibiza bar” a una de sus canciones. Gracias a este grupo de personas, dieron a conocer la isla al mundo y atraían a Hippies de todas partes, enamorados del ambiente cultural, que en un principio poseía la isla para sus visitantes.

Ya en la época de los 70, empezaron a surgir las discotecas Pacha y Glory’s, que representaban el estilo hippie y amigable de aquel  entonces, ya que no eran lo que conocemos hoy en día, eran discotecas pequeñas con el encanto típico del entorno que envolvía a la isla.

A partir de aquí la isla toma un carácter totalmente distinto, discotecas como amnesia o KU le dan más fama a nivel internacional, conciertos como el de Bob Marley en el  78 y Freddy Mercury, por poner un par de ejemplos, ya que son incontables los grandes músicos que pasaban por la isla.

Más tarde, y debido a la influencia de la música underground inglesa, se produce un cambio en la década de los 90. Promotores musicales como Ministry of Sound o Manumission, renuevan el concepto al estilo electrónico y de exclusividad que hoy sabemos que impera en ella. Listas VIPs de distintos tipos, precios desorbitados, paquetes turísticos que incluyen hotel y entradas en una u otra discoteca… depende del dinero que te gastes, accederás a una Ibiza u otra, esa es la verdad de hoy en la isla.

Así que lo que conocemos como “the party island”, un dia fue la “hippie island” donde la amabilidad y el arte desbordaban, y donde hoy lo que desbordan son las carteras de los empresarios de los distintos lugares de ocio, hoteles y discotecas, que buscan el máximo beneficio y han olvidado los orígenes isleños.