Pocos edificios hay en el mundo tan singulares y tan icónicos como la Casa de la Ópera de Sidney. No hace falta una foto o un dibujo para recordar su estructura en forma de conchas, sobre la bahía de la ciudad, a la que le ha dado tanta fama y donde la filarmónica de Sidney realiza conciertos memorables.
Este pasado domingo día 20 de noviembre, se celebró el 40 aniversario de su inauguración, en el año 1973, a la que asistieron miles de personas y donde el cantante de rock, Jimmy Barnes, le cantó cumpleaños feliz. La semana estará llena de eventos y actos, que culminarán el domingo con un concierto por parte de la filarmónica ya citada, a la cual asistirá el príncipe Federico de Dinamarca.
Diseñada por el arquitecto Jorn Utzon, fue declarada patrimonio de la humanidad en el año 2007 y entre muchas de las curiosidades y anécdotas que guarda este sitio tan emblemático, cabe destacar que el propio arquitecto abandonó el país antes de terminar su construcción, debido a conflictos con los tiempos y presupuestos y declaró que no volvería a pisar la isla en su vida, cosa que no cumplió debido a que tuvo que regresar para unas reformas en el interior del recinto para mejoras acústicas.
Al final, aunque tardaran 14 años en construirla, no le salio tan mal, ya que hoy en día ¿quién no conoce, o ha visto su edificio? Su diseño se estudia en escuelas y universidades, tanto de arquitectura, como de arte, e inspira a otros arquitectos a romper con lo establecido, y crear edificios que son obras de arte más que simples estructuras convencionales.
Como dijo el arquitecto conocido como Le Corbusier "La arquitectura es cosa de arte, un fenómeno de emociones, que queda fuera y más allá de las cuestiones constructivas. El propósito de la construcción es mantener las cosas juntas y el de la arquitectura es deleitarnos".
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